27 de agosto de 2011
Pasa el tiempo, nos separa la distancia.
Segundos, minutos, horas, días, semanas, meses.
Milímetros, centímetros, metros, kilómetros.
Situaciones, espacios, momentos, conversaciones, presencias.
Lo primero, si es mucho, puede disolver hasta las más altas montañas existentes. Lo segundo, si es mucho, puede mermar hasta los más poderosos lazos terrenales. Sin embargo, lo tercero es lo que puede hacernos luchar contra los dos primeros puntos a pesar de todas las consecuencias.
El tercer punto reúne algunas de las cosas que nos hace luchar contra fuerzas tan inexpugnables como el tiempo y el espacio, todo para poder ser poseedores de algo más fuerte, cercano y duradero que los lazos mundanos y las montañas comunes.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario